La principal duda que surge en torno a las deducciones por I+D+i es si las actividades de una empresa encajan dentro del marco legal definido. Según la Ley del Impuesto sobre Sociedades, este incentivo está diseñado para fomentar la innovación tecnológica. En términos sencillos, si una empresa desarrolla nuevas tecnologías o mejora las existentes, ya sea a través de nuevos productos, procesos o software, podría ser candidata a estas deducciones. Lo fundamental es que haya un componente de novedad o mejora tecnológica, aunque no sea una innovación radicalmente disruptiva.
¿Tu empresa desarrolla nuevas tecnologías o mejora las existentes? Si es así, las deducciones fiscales por I+D+i podrían ser una gran oportunidad para reducir tu carga fiscal. Este incentivo está diseñado para fomentar la innovación, desde grandes avances hasta pequeñas mejoras. No importa si ya existen tecnologías similares, lo importante es que tu empresa esté creando algo nuevo o mejorando lo que ya tiene. Incluso desarrollar software personalizado puede ser considerado I+D+i.
Todos los años, tras la entrega de nuestros informes los clientes nos preguntan cómo aplicar el crédito fiscal conseguido en el impuesto de sociedades. En este articulo vamos a repasar los pasos a seguir para reflejar en tiempo, antes del cierre del IS el 25 de julio.
Muchas empresas nos preguntan cómo se aplican las deducciones fiscales por I+D+i en el Impuesto sobre Sociedades.
Cómo calcular el crédito fiscal de las deducciones fiscales por I+D+i
La deducción fiscal por actividades de I+D+i se calcula siempre como un porcentaje de los gastos en los que la empresa haya incurrido al desarrollar estas actividades o proyectos. En el cálculo se incluyen los costes de personal, materiales, colaboraciones externas y la amortización de activos.
Para los proyectos de Innovación Tecnológica (IT), la deducción es del 12% del gasto total. En el caso de proyectos de Investigación y Desarrollo (I+D), el porcentaje de deducción varía entre un 25% y un 42%.
Es relevante señalar que los gastos de años anteriores también pueden recuperarse de manera retroactiva.
Cómo se aplican las deducciones por I+D+i en el Impuesto sobre Sociedades
Al completar el modelo 200, es fundamental considerar varios aspectos. La deducción se aplica directamente sobre la cuota del impuesto sobre sociedades. Específicamente, las deducciones fiscales por actividades de I+D+i solo pueden aplicarse hasta un 25% o 50% de la cuota líquida, que corresponde al importe a pagar en cada ejercicio, dependiendo del caso particular.
Si no se puede aplicar la totalidad de la deducción en un ejercicio, el excedente puede utilizarse en ejercicios futuros. La empresa dispone de un plazo de 18 años para aplicar estas deducciones, lo que ofrece un margen amplio. Esto permite a muchas empresas generar créditos fiscales si prevén que en el futuro tendrán cuotas positivas.
A continuación, vamos a enseñar el ejemplo de una empresa con CNAE tecnológico que aplica las bonificaciones por personal investigador, refleja anualmente en su impuesto de sociedades las deducciones fiscales por desarrollo de proyectos IT y solicita la monetización de las anualidades de las que ha obtenido IMV.
En la primera pagina del impuesto, la empresa solicita la monetización de las deducciones reflejadas en el impuesto anterior (2019), por otra parte, refleja las bonificaciones por personal investigador aplicadas:
En la página 17 se reflejarán en las celdas correspondientes a las deducciones generadas por proyectos IT en las casillas ‘Innovación tecnológica (IT)’ y por proyectos I+D en las casillas ‘Investigación y desarrollo (CT)’.
Si la empresa no dispone de suficiente cuota para aplicar la deducción fiscal generada, tiene la opción de solicitar el abono de una parte y utilizar hasta el 80% de la cuota disponible.
Esta monetización de la deducción se realiza a través del mismo modelo 200, en unas celdas específicas habilitadas para ello. Sin embargo, esto solo es posible si la empresa ha solicitado o recibido un informe motivado vinculante del Ministerio, que sirve como garantía para la correcta aplicación de la deducción.
¿Qué mecanismos de acceso existen para acceder a estas deducciones?
Las empresas pueden cuestionarse el riesgo asociado a la aplicación de este incentivo fiscal en dos aspectos: si su uso aumenta la probabilidad de ser inspeccionadas por la Agencia Tributaria (AEAT) y si, tras haberlo aplicado, existe riesgo de sanción o revocación en una inspección futura.
Respecto a la primera inquietud, desde H2IDI no hemos observado que la aplicación de deducciones fiscales por I+D+i incremente las posibilidades de recibir una inspección. En cuanto a la segunda preocupación, la Ley no exige que las empresas utilicen un mecanismo de aseguramiento específico para aplicar este incentivo. Esto significa que una empresa puede optar por aplicar las deducciones bajo su propio criterio, asumiendo el riesgo y esperando una posible revisión de la AEAT en caso de que esta solicite aclaraciones.
Existen diferentes vías para obtener y aplicar estas deducciones fiscales I+D+i:
- Autoliquidación, en esta entrada os dejamos una explicación más detallada .
- Consulta vinculante
- Acuerdo previo de valoración
- Informe Motivado Vinculante
Existen mecanismos de que pueden reducir el riesgo frente a la AEAT. Desde H2IDI, recomendamos la certificación del proyecto a través de entidades acreditadas por ENAC, las cuales evalúan tanto el aspecto técnico como el económico del proyecto.
Estas entidades emiten un informe y un diploma que certifican la calificación del proyecto como I+D+i, y validan los gastos correspondientes. Con esta certificación, la empresa puede calcular la deducción aplicable con mayor seguridad. El coste de esta certificación es de aproximadamente 3.000€ – 4.000€ por proyecto, por lo que resulta rentable cuando el volumen de gasto del proyecto justifica ese coste.
Una vez obtenido este certificado, la empresa puede solicitar sin coste un Informe Motivado al Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades. Este informe es vinculante para la Agencia Tributaria en lo que respecta a la calificación de las actividades, lo que proporciona la mayor seguridad posible al aplicar la deducción y de cara a posibles inspecciones futuras.
Desde H2IDI trabajamos el mecanismo de aseguramiento consistente en la certificación ENAC. Contamos con un 100% de éxito en la certificación de los proyectos que presentamos, ocupándonos de todo el proceso hasta la aplicación de la deducción en el modelo 200. Trabajamos a éxito y cobramos una vez entregado el informe en la modalidad de seguridad jurídica elegida por el cliente.
Si te interesa que analicemos tu caso sin compromiso o que te asesoremos, puedes contactarnos a través de nuestro apartado de contacto.